miércoles, 23 de julio de 2008

Vacaciones, me fui a vivir historias


Necesitaba un cambio de aire, un respiro profundo, algo que me de un poco más de vida y me ayude a seguir.
Lo pensé tres meses pero lo decidí en un momento. El celular sonó, Victor y El Flaco, dos amigos, hablaban desde Tartagal. Bruno ya se había ido, en su auto, con todo el asiento de atrás para mí solo; y yo acá, sin palabras.

- ¿Así que no venís?, me preguntaron.
- Si che, me quedo, respondí.

Me mordí los labios para no llorar, para no descargar todo lo que me había guardado. Victor me quiso animar, que estaba todo bien, que seguro ya íbamos a tener oportunidad para vernos. Pero no quería eso, quería irme ya, en ese preciso momento. A veces es difícil hacer lo que uno quiere, aunque desde afuera uno crea que todo está bajo el control de cada uno.

Después de colgar, mire para abajo y una lagrima se deslizo por mi mejilla. Ahí fue cuando dije: me voy a Tartagal.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Cada cierto tiempo es necesario oxigenarse. Un momento en TU LUGAR, una charla con amigos..o simplemente apagar el botoncito..sirve para arrancar con todo nuevamente.
chau profe

tantomundo dijo...

qué relato, fabio! como siempre, visual, bárbaro, capo!

volvé también a perrosladran apenas puedas.

te mando un abrazo.-

Fabio Martinez dijo...

Rodri, gracias por el aguante y por estar siempre ahí pidiendo que actualize el blog.
Y también gracias por entender mis sentimientos.
Un abrazo grande

Fabio Martinez dijo...

Martin amigazo, como los extraño a todos.
Gracias por estar y seguir mis historias,
pronto se va a venir la segunda parte del remis blanco, bien blanco.

un abrazo grande